La importancia del pelo es clave para sentirnos a gusto con nuestra imagen. Hace poco leímos un proverbio italiano:
“La belleza de una persona reside en su pelo”
¿Por qué la belleza capilar importa?
Claramente es una afirmación banal, algo retrograda y exagerada. Sin embargo, no podemos obviar es de la importancia del cabello en el conjunto de la imagen que proyectamos. En un ámbito “beauty” si el pelo esta bien, todo suele estar mejor. Y, en paralelo, incide y sucede lo mismo con un «look adecuado», el que queremos o deseamos.
Cuando salimos de casa, cuando elegimos un conjunto o un estilo de vestir que nos define, nos importa en 90% del tiempo. Podemos combinar prendas de marca con otras adquiridas en tiendas low cost. Pero, al final, lo importante es el conjunto y como nos ayuda y la forma en que comunicamos nuestra personalidad y estado de ánimo a través de ello.
La diferencia radica, en que el pelo tiene unas connotaciones diferentes. Por ese motivo creamos centros capilares en Madrid y en Valencia. Estamos preocupados en NHC por crear las mejores soluciones capilares. Desarrollamos tratamientos capilares para resolver problemas del cabello.
Lo que opinan los expertos…
Los psicólogos y otros profesionales médicos suelen advertir que el pelo tiene consecuencias psicológicas positivas, cuando estamos a gusto con su estética; porque provocan crear una predisposición consciente o inconsciente. Nos hace sentirnos más seguros, menos estresados y más fuertes. Acudir a centros capilares para buscar solucionar los problemas del cabello, es algo muy frecuente.
Debemos desestimactizarlo. Utilizar sistemas de implementación capilar con soluciones indoloras y personalizadas debe ser algo normal. y positivo. A día de hoy, los expertos continúan dando ejemplos de la importancia del pelo. Tener el pelo bonito da más energía que un buen desayuno. Puede proporcionarnos mayor bienestar que el maquillaje o la ropa. Más autoestima y capacidad de enfrentarnos a adversidades.
Por lo tanto, resulta incomprensible y contradictorio no buscar las mejores soluciones para los problemas capilares. Soluciones capilares ante la alopecia femenina, la alopecia areata, la calvicie masculina o simplemente una densidad menor de pelo.
El antiguo bisoñé ha dado paso a prótesis y sistemas de integración capilares naturales y elegantes, prácticamente imperceptibles. Creadas y adaptadas perfectamente a cada persona. Personalizadas y elaborada en nuestros centros capilares propios con metodología de ultima generación.
Todas estas afirmaciones derivan de un estudio desarrollado por la Universidad de Yale. Según el estudio, hemos descubierto que el pelo es muy importante en términos de implicaciones psicológicas y sociológicas. Un good hair day hace a la gente sentirse más segura, más sociable y mejor en general- explican desde la dirección del estudio.
Por lo tanto, de nuevo realizamos la misma pregunta. Si es tan importante, por que no normalizar la búsqueda de soluciones capilares. Buscar un centro capilarque nos ofrezca la máxima confianza. Buscar soluciones, en definitiva.
Cuando hablamos con estilistas, ellos nos confirman lo importante de esa trascendencia en su trabajo. Saben que tienen la capacidad de influir en el estado psicológico de las personas. Aunque en contra de lo que se suele recomendar, el mejor momento de acudir a la peluquería es cuando se esta receptivo. Digamos que es una medida de prevención para el momento de crisis capilar. Acudir con una actitud positiva y predisposición.
Estética y salud… a la par¡Las mejores soluciones ya!
Este es uno de los motivos, por los que también se aconseja a los enfermos de cáncer realizar una visita temprana a su centro capilar de confianza. Si deciden utilizar peluca oncológica durante el tratamiento es mejor realizar el comienzo del camino pronto. De esa manera los expertos podrán crear una solución capilar más natural, más personalizada y más conforme a las necesidades del paciente.
Además, podemos utilizar ese momento de angustia, como una oportunidad. Esa situación, no ya oncológica, sino de problema capilar, como el momento del cambio. Y así reconciliarnos con nuestra imagen. Hacer coincidir un momento vital de nuestra vida con su elemento transmisor. Nuestra imagen NOS IMPORTA.